viernes, 26 de septiembre de 2014

DOS ALMAS

Y fue entonces
cuándo tu voz leía
en la calma de mi brisa
tu alma perdida.
Bésame , cuándo escribo,
intento ir despacio,
para que busques lo que no está
en sitio alguno.
La vida es melodía,
es agradecimiento,
los misterios se despiertan
y con razón, los sentimientos.
Buscamos lo que es nuestro,
lo que ya se sabía,
despertar en la verdad
amando la lectura.
No miremos más atrás,
no hay nada que mirar,
alcanzamos la meta
sin comenzar a soñar.
Qué vacío más lleno
me acompaña hoy
en las sonrisas de mi infancia,
! Cómo te amé! Gracias.
Adios,
a la palabra que no baila,
siempre conmigo, y en mi,
tu alma.

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